El país se ha cubierto de luto. La masacre de más de 18 mil mexicanos es una muestra de esta inútil lucha en la cual se ha dejado de lado la inteligencia por el uso de la fuerza bruta, donde se ha dejado de lado el confiscar los bienes y el dinero por la apuesta de las armas.
Ahora ya no se trata de crímenes entre delincuentes y policías, ahora la sociedad civil, los jóvenes se encuentran como blanco de ataques no solo de los criminales sino de las mismas autoridades.
Después del 16 de septiembre del 2008 (donde se lanzaron varias granadas a los asistentes a los festejos patrios en Morelia, Michoacán) los ciudadanos se volvieron blanco de la estrategia de terror que afecta actualmente a cientos de ciudadanos que salen a las calles con el temor de no poder retornar con vida a su hogar.
Con el asesinato de 16 jóvenes en Ciudad Juárez, se abrió nuevamente esta herida, éste escenario en el cual la sociedad civil esta siendo agredida, apenas hace unos días grupos delictivos detuvieron a varios automovilistas, entre ellos camiones para atravesarlos en las carreteras para sembrar el pánico y el caos en Monterrey.
Pero ahora, debemos sumar a las agresiones de los delincuentes las agresiones de las “autoridades”, existen por lo menos tres casos en los cuales están relacionadas autoridades policíacas y militares en la desaparición de varias personas, por lo cual debemos demandar que se esclarezcan y se castigue ejemplarmente a los culpables.
Para empezar en esta semana se dio el asesinato de dos jóvenes estudiantes del Tec de Monterrey los cuales según el Secretario de Gobernación fueron abatidos por sicarios ya que estos jóvenes estaban cerca de los soldados, lo que no cuadra, sin embargo, es que la madre de uno de ellos denuncio que su hijo estaba desfigurado, lo que equivale a que fue torturado, además se les despojo de sus identificaciones lo que enrarece aun más las causas reales de los asesinatos.
También se encuentra el caso de dos jóvenes que fueron detenidos por autoridades policíacas, en uno de lo casos el joven apareció muerto con señales de tortura (martes 23 de marzo), en el otro caso el joven fue hospitalizado y se encuentra desaparecido, en ambos casos hay pruebas graficas -video y fotografías- en las cuales se muestra siendo detenidos por elementos policíacos.
Existe un desconcierto casi generalizado, un temor en muchos sectores de la sociedad, el cual se esta expandiendo hacia las clases más pudientes de la sociedad, ya existen vario padres de familias adineradas que se encuentran clamando justicia.
Hace poco escuche al relator de la ONU para America Latina decir que ahora existe un grupo muy importante de personas que se están beneficiando con el asunto del narcotráfico, entre estos existen grandes empresarios y comerciantes que se encuentran en el lavado del dinero, que estos son parte del problema y que cuando la clases más altas de este país comiencen a percibir que se encuentran en problemas comenzaran a ser parte de la solución.
Pues parece que ahora pueden empezar a sentirse preocupados ya que me temo que estamos entrando en una nueva fase del narcotráfico, en la cual los ciudadanos y cualquier persona puede ser blanco de estos ataques.
Ahora ya no se trata de crímenes entre delincuentes y policías, ahora la sociedad civil, los jóvenes se encuentran como blanco de ataques no solo de los criminales sino de las mismas autoridades.
Después del 16 de septiembre del 2008 (donde se lanzaron varias granadas a los asistentes a los festejos patrios en Morelia, Michoacán) los ciudadanos se volvieron blanco de la estrategia de terror que afecta actualmente a cientos de ciudadanos que salen a las calles con el temor de no poder retornar con vida a su hogar.
Con el asesinato de 16 jóvenes en Ciudad Juárez, se abrió nuevamente esta herida, éste escenario en el cual la sociedad civil esta siendo agredida, apenas hace unos días grupos delictivos detuvieron a varios automovilistas, entre ellos camiones para atravesarlos en las carreteras para sembrar el pánico y el caos en Monterrey.
Pero ahora, debemos sumar a las agresiones de los delincuentes las agresiones de las “autoridades”, existen por lo menos tres casos en los cuales están relacionadas autoridades policíacas y militares en la desaparición de varias personas, por lo cual debemos demandar que se esclarezcan y se castigue ejemplarmente a los culpables.
Para empezar en esta semana se dio el asesinato de dos jóvenes estudiantes del Tec de Monterrey los cuales según el Secretario de Gobernación fueron abatidos por sicarios ya que estos jóvenes estaban cerca de los soldados, lo que no cuadra, sin embargo, es que la madre de uno de ellos denuncio que su hijo estaba desfigurado, lo que equivale a que fue torturado, además se les despojo de sus identificaciones lo que enrarece aun más las causas reales de los asesinatos.
También se encuentra el caso de dos jóvenes que fueron detenidos por autoridades policíacas, en uno de lo casos el joven apareció muerto con señales de tortura (martes 23 de marzo), en el otro caso el joven fue hospitalizado y se encuentra desaparecido, en ambos casos hay pruebas graficas -video y fotografías- en las cuales se muestra siendo detenidos por elementos policíacos.
Existe un desconcierto casi generalizado, un temor en muchos sectores de la sociedad, el cual se esta expandiendo hacia las clases más pudientes de la sociedad, ya existen vario padres de familias adineradas que se encuentran clamando justicia.
Hace poco escuche al relator de la ONU para America Latina decir que ahora existe un grupo muy importante de personas que se están beneficiando con el asunto del narcotráfico, entre estos existen grandes empresarios y comerciantes que se encuentran en el lavado del dinero, que estos son parte del problema y que cuando la clases más altas de este país comiencen a percibir que se encuentran en problemas comenzaran a ser parte de la solución.
Pues parece que ahora pueden empezar a sentirse preocupados ya que me temo que estamos entrando en una nueva fase del narcotráfico, en la cual los ciudadanos y cualquier persona puede ser blanco de estos ataques.
2 comentarios:
muy interesante tu artículo. Otro punto que vale la pena mencionar es que las ciudades y estados que hace 9 años no se veían inmersos en esta problemática ahora lo están, como el caso de Nuevo León, estado de México, Morelos, etc. Y
Asi es la delincuencia avanza, lamentablemente.
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