miércoles, febrero 04, 2009

LA FERIA DE LAGOS UN ROBO EVIDENTE.

Indignación es la palabra que describe mejor el estado de ánimo que me embarga al conocer la concesión de la feria de Lagos de Moreno para este 2009. Es evidente a todas luces que se trata de un atraco, un robo vulgar, perpetrado por una pandilla de ladrones que se dicen llamar representantes del pueblo.

En palabras de dos ex funcionarios que organizaron la feria uno Abraham Aldana Aldana hace 10 años, el cual entrego como utilidad 800 mil pesos y Heladio Ruiz Olmos hace 8 años el cual entrego una utilidad de un poco menos de un millón 200 mil pesos. Asegurando este ultimo que las ganancias deben rondar en los dos millones de pesos. Según información de a.m. de Lagos de Moreno.

Sin embargo, como es sabido el año pasado se encargo de la organización el Sr. Javier Lara, entregando cuentas que estuvieron llenas de inconsistencias graves, ya que no se especifica, por ejemplo, cuanto se cobra por un espacio estándar o cuanto cobraron los espectáculos traídos, ya que no se tiene factura. Al final se reporto una ganancia para el Ayuntamiento que no llega a los 500 mil pesos.

Pero lejos de hacer una fiscalización exhaustiva y buscar fincar responsabilidades, los señores regidores se burlan del ciudadano y concesionan la feria a la empresa Huateque S.A. de C.V. por la cantidad de 500 mil pesos, un verdadero insulto.

Si hacemos algunos cálculos veremos, por ejemplo, que si la entrada al núcleo de la feria es de 8 pesos por persona y según un cálculo conservador entran en promedio 10 mil personas por día, por 16 días que dura la feria nos dan un poco más de un millo 280 mil pesos. Esta es una entrada que no es la más importante, pues el verdadero negocio es la venta de espacios tanto en el núcleo de la feria como en las calles adornadas. Además de sumarle la ganancia de la recaudación de los baños y la ganancia de los espectáculos.

Según lo regidores, la falta de tiempo, es la causa de la repentina decisión, escusa absurda pues la fecha de las fiestas es fija y ellos tienen ya dos años en la administración municipal. Así es que no se pueden mostrar sorprendidos.

La falta de un reglamentación es indispensable, no es posible que por eludir su responsabilidad de normar tomen decisiones tan torpes, o son tontos o son ladrones no hay de otra.

La administración pública municipal no puede hacerse a un lado y dejar a la administración privada hacer negocio a costa de la población, el deber del administrador público es hacer una buena norma y dirigir con eficacia la feria. La empresa privada buscara ante todo el lucro, la ganancia, y la empresa pública debe buscar, en este caso, el sano esparcimiento con eventos de calidad a bajo costo.

Por último es patente la falta de una oposición real, articulada, que sea critica y propositiva cuando se deba.

30/01/09

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